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Andrés y Ana, que así se llama la pareja, visitaron el famoso parque temático Port Aventura de Salou (Tarragona) el pasado fin de semana. Era su primera vez en el parque y recomendados por unos amigos quisieron probar conocida atracción llamada Dragon Khan. La sorpresa fue cuando al bajar de la atracción sus caras habían quedado completamente descuadradas.
“Creo que no fue una buena elección ponernos en la primera fila, queríamos sentir la velocidad y vaya que si la sentimos…” Explicó Andrés tras bajar de la atracción. El equipo médico del parque atendió a la pareja nada más bajar de la atracción pero no pudieron poner remedio a lo sucedido. Según una nota de prensa hecha pública por PortAventura aclaran que “esto no es más que un trastorno post traumático pasajero que remitirá por si solo sin necesidad de medicación en los próximos días”
Aun así la pareja está decidida a denunciar los hechos y han puesto el tema en manos de sus abogados. “Yo soy profesora de instituto, imagínate ahora cómo me voy a presentar de ésta forma ante mis alumnos” declara Ana, además añadió que “si nos hemos decidido a denunciar es precisamente porque no queremos que más gente pase por esto”
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