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De forma sorpresiva y sin que se le haya dado la publicidad adecuada, posiblemente de forma intencionada, la declaración de la renta de este año presenta una novedad que pocos han advertido. Este año, además de donar el 0,7% a la iglesia o a otras organizaciones no gubernamentales, también será posible elegir como destinatario de la donación a la Casa Real Española.
Debido a los recortes de los últimos años y a la pérdida de popularidad de los integrantes de la Familia Real, los fondos destinados a esta institución se han visto disminuidos. Es por ello que El Ministerio de Hacienda ha querido echar una mano y ha añadido la citada casilla, la cual no servirá para cubrir los gastos propios de la Corona, que ya están cubiertos por ley, sino para completar otros gastos adicionales que permitan a SS.MM. y familia vivir un poco más desahogadamente.
Entre los gastos que cubrirá esta aportación desinteresada estarán las vacaciones reales en la nieve, las megafiestas de cumpleaños de los pequeños y todos los tratamientos estéticos de la familia real.
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