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Es un hecho que la vuelta a la vida normal tras el confinamiento sufrido por la crisis del coronavirus será escalonado y la sociedad tendrá que tomar medidas de seguridad para evitar contagios si no queremos volver a sufrir un nuevo brote del virus.
Benidorm no quiere dejar de ser la referencia del turismo en España y es por eso que ha comenzado a tomar medidas para poder seguir recibiendo turistas garantizando las medidas de seguridad en sus playas. Es por eso que ha encargado un total de 100.000 toneladas de arena que será importada directamente desde el desierto del Sahara para poder agrandar sus dos grandes playas.
Con ésta medida el Ayuntamiento de Benidorm pretende duplicar el tamaño de sus playas con el fin de que los usuarios de las mismas puedan disfrutarlas sin dejar de mantener la distancia de seguridad recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para evitar el contagio del coronavirus. Se estima que las labores de ensanchamiento de las playas de Benidorm terminen para finales del mes de Mayo, la fecha perfecta para recibir a los primeros turistas.
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