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En ocasiones caminar por las calles de cualquier ciudad importante se convierte en un peligro para los peatones, y no precisamente por el riesgo de ser atropellados por los coches, sino más bien por los propios transeúntes que llevan abiertos sus paraguas convirtiéndose en una amenaza real para el resto de personas.
A pesar de las advertencias de las autoridades sobre el riesgo del uso de los paraguas mientras se camina, cientos de transeúntes hacen caso omiso y “entierran” sus cabezas como avestruces dentro de los paraguas cuando llueve, obligando a los demás peatones a esquivarles a un lado para evitar la colisión y en ocasiones males mayores como lo sucedido en el casco viejo de Bilbao hace aproximadamente un mes cuando una joven casi pierde un ojo.
Por ello, el ayuntamiento de Bilbao se ha puesto manos a la obra designando varios tramos de unos 100 metros de acerca por las zonas más transitadas de la cuidad. El carril para gente con paraguas se llamará “aterkiarril”, y verá la luz el próximo 1 de marzo aprovechando el mal tiempo. Hasta entonces, el Alcalde Bilbao, Juan María Aburto Rike, ha prohibido el uso de los paraguas en la ciudad animando a la gente a que «usen las caputxas de sus cazadoras por primera vez en su vida».
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