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Los hechos ocurrieron el pasado fin de semana en pleno centro de Cádiz con motivo de un control de alcoholemia llevada a cabo por la Policía Local.
Tras indicar a un vehículo que accediera a la zona de control y una vez comprobada la documentación, se informó al conductor que iba a ser sometido a las pruebas de alcoholemia, arrojando en la primera prueba un resultado de 0’77mg/l de aire espirado y en la segunda prueba 0’79 mg/l. Tras informar al conductor que sobrepasar los 0’60mg/l suponía un delito contra la Seguridad del Tráfico, el susodicho alegó un situ «sé que doy positivo pero es por mi trabajo, soy escupefuegos en un circo y claro, la gasolina hace que el aliento salga así, pero yo no he bebido alcohol, jefe, ¿el pirulo ese va a pilas? o… ¿se recarga como el móvil?»
Tras proceder a la detención del supuesto circense e inmovilizar el vehículo, fue trasladado a dependencias policiales para llevar a cabo el Atestado, quedando a disposición judicial y aconsejándole que fuera practicando con el fuego por si el Sr. Juez veía conveniente que le hiciera una demostración.
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