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El curioso suceso tuvo lugar en Tenerife, una canguro de 22 años de edad ha sido denunciada por los padres de uno de los niños que cuida habitualmente por poner los muñecos en posiciones sexuales.
La joven lleva 2 años compaginando su trabajo como canguro con sus estudios y aparentemente destacaba positivamente en ambos campos. Pero recientemente algo cambió, los padres de uno de los niños acudieron a la Policía tras detectar una costumbre bastante perturbadora en la cuidadora de su hijo. Al volver a casa varios de los muñecos de su pequeño se encontraban colocados en distintas posiciones sexuales. Al principio pensaron que era casualidad, pero tras varias semanas decidieron tomar medidas.
La joven ha confesado que no lo hacía con malicia «a ver, se que puede parecer extraño, pero el sexo es algo normal, lo mismo que jugamos a hacerlos pelear o a tomar el té también me gusta hacer como que mantienen relaciones, al fin y al cabo todo es cultura».
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