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La policía lleva más de 30 años investigando a las personas que en la puerta de los colegios esperaban a los niños para regalarles caramelos. Tras la detención y el interrogatorio de una de éstas personas que fue arrestada la semana pasada frente a un colegio de Girona la policía por fin ha podido avanzar en la investigación.
Al parecer el detenido trabajaba para una banda organizada de dentistas que enviaba a intermediarios a las puertas de los colegios a repartir caramelos con el fin de conseguir “picar” los dientes a los niños y poder así ganar clientes. A la persona arrestada, un hombre de mediana edad, de nacionalidad española, se le intervino una cantidad cercana a los dos kilos de caramelos con alto contenido en azúcar, capaz de provocar caries por lo menos a 100 niños según ha podido valorar el departamento científico de la Policía.
El Cuerpo Nacional de Policía continúa la investigación para comprobar si ésta organización pudiera estar detrás de que los refrescos azucarados tengan cada vez más contenido en azúcar.
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