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Un camarero de un chiringuito de Salou ha sido despedido este fin de semana tras tardar más de 6 horas en llevar la cuenta a unos clientes.
Dichos clientes aguantaron estoicamente durante todo ese tiempo hasta que, una vez pagaron, fueron a hablar con el responsable que decidió despedir inmediatamente a su trabajador «cuando los vi me sorprendió, les pregunte si se habían dejado algo cuando vinieron a comer por la mañana y me sorprendí al escuchar que todavía no se habían ido porque acaban de pagar la cuenta tras 6 horas esperando». La familia de madrileños recibió además como compensación una cena gratis y las disculpas del gerente «cenamos agradecidos y nos fuimos, así terminó nuestro día de vacaciones, como empezó, metidos en ese chiringuito».
Según han comentado al principio se lo tomaron a broma «es lo típico, el camarero te dice que ya va, que esperes, que ahora te la lleva, pero iban pasando las horas y nos lo tomamos como algo personal, somos muy competitivos y de ahí no nos iba a mover nadie hasta que nos trajese la puta cuenta». El camarero por su parte se ha justificado «les noté esa chulería madrileña desde el principio, así que pasé de ellos, no me arrepiento».
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