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Una auxiliar de enfermería ha sido despedida de la Clínica Virgen de los Necesitados de Córdoba tras detectar que estaba realizando su trabajo de una manera irregular, en concreto ayudaba a los donantes en su proceso realizándoles una felación.
Al parecer llevaba ya varios meses desempeñando esta función extra en su trabajo diario, pero cuando se han enterado en dirección se han visto obligados a tomar acciones «no podemos permitir este tipo de artes en nuestra clínica, nos extrañaba el aumento tan enorme de donantes en las últimas semanas, ahora lo entendemos pero tenemos un prestigio, no podemos ofrecer lo mismo que un local de carretera».
La joven consternada ha tratado de justificar sus acciones «a ver, que yo tampoco me he puesto a chupar pollas por afición, simplemente vino un donante y me pidió ayuda porque estaba muy nervioso, una cosa llevó a la otra y acabé haciéndolo y el resultado fue muy bueno, así que por el bien de la producción de la clínica seguí con el método». Finalmente, y tras escuchar sus alegatos, el director de la clínica dará una segunda oportunidad a la joven «siempre y cuando mantenga la boca cerrada durante su jornada».
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