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Un vecino de la localidad almeriense de Garrucha fue detenido por la Guardia Civil en un control rutinario de alcoholemia realizado en el cercano pueblo de Villaricos a pesar de haber dado negativo en dicha prueba.
Cuando Enrique Riquelme, que así se llama el protagonista de ésta historia, fue parado por la Guardia Civil éste insistió al sargento que no había bebido ni una sola gota de alcohol, que venía de trabajar y que tenía algo de prisa por llegar a casa. “El Sargento me miró fijamente a los ojos durante al menos 10 segundos que se me hicieron eternos, me dio la boquilla y con una voz amenazante me dijo, sople aquí. No me creyó que no había bebido” Explica Enrique en su declaración. “Como no quería discutir soplé como me dijo el guardia, lógicamente di negativo, no había bebido y me cabreó que me hicieran perder el tiempo”.
Cuando el Sargento indicó a Enrique que todo estaba bien y que podía continuar su marcha, éste con clara intención de venganza y mientras iniciaba la marcha de su vehículo gritó por la ventana desvelándole al guardia cuál era el final de la séptima temporada de la conocida serie de HBO, Juego de Tronos. Ésto provocó el enfado del Guardia Civil, que inició una persecución tras élhasta detenerlo a unos 5 kilómetros en la localidad de Vera. Finalmente Enrique fue detenido y puesto a disposición judicial acusado de “Spoiler” a la autoridad, por lo que se enfrenta a una pena de prisión de 1 año y hasta 3.000€ de sanción.
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