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Un empleado de una empresa de servicios de internet de Bilbao ha sido detenido con cargos tras haber sido denunciado por su jefe. El motivo es que este empleado, que tenía rencillas pendiente con su responsable por no haberle concedido varios asuntos propios en días señalados, se había vengado de él añadiendo fotos porno a una presentación muy importante ante unos clientes de renombre.
En la página 45 de la presentación de repente apareció un señor de color con sus genitales al aire. Rapidamente el conferenciante trató de pasar de página pero las siguientes eran fotos de orgías y situaciones conocidas como bubkakes. El escándalo fue mayúsculo, acompañado del enfado de los clientes y por tanto la pérdida del contrato millonario que estaba pendiente de un hilo.
Ante esta situación el empleado fue no solo despedido inmediatamente, sino denunciado ante la policía que lo detuvo a los pocos días en su domicilio. Ahora se enfrentará a una más que posible condena por daños y perjuicios.
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