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Un joven de 24 años de edad ha sido detenido la noche de ayer por la Guardia Civil al simular que iba borracho y bebiendo whisky mientras realizaba un control de alcoholemia.
Los hechos ocurrieron en la carretera Nacional N-554 la salida de Pontevedra donde una patrulla de la Guardia Civil se encontraba realizando un control rutinario de alcohol y drogas. Al ser detenido, el joven mostraba signos evidentes de estar borracho y demás bebía desesperadamente de una botella de whisky pero las 4 veces que sopló en el alcoholímetro dieron negativo por lo que los guardias se vieron obligados a llamar a los atestados para realizarle una prueba más. El análisis de sangre tampoco detectó alcohol en la sangre del joven por lo que éste terminó confesando que todo se trataba de una broma.
Al parecer el joven quiso gastar una broma a los agentes por lo que rellenó una botella de whisky con redbull e hizo que iba borracho para echarse unas risas. Finalmente la Guardia Civil decidieron detener al joven acusándolo de falta de respeto a la autoridad y el joven pasó la noche en el calabozo a la espera de juicio rápido.
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