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Cuando una relación de pareja es muy duradera tras años de noviazgo y de matrimonio, ambos se conocen tanto que ante cualquier reacción extraña de uno de ellos, enseguida es detectado.
Los hechos han tenido lugar en un municipio de Badajoz, una mujer de 49 años se personaba en el Servicio de Urgencias de la localidad al observar que su zona genital se ponía azul aumentando de intensidad por momentos, siendo remitida con urgencia al hospital. Tras avisar a los familiares cercanos para descartar que se tratara de intoxicación o enfermedad contagiosa, se comprobó que el cuñado también presentaba dicha coloración en pene y testículos habiendo evidente coincidencia, por lo que fueron preguntados al respecto confesando al médico que a pesar de ser cuñados, habían mantenido relaciones sexuales.
«He sido yo, compré a mi marido condones que dejan manchas azules porque me olía que tenía alguna amante pero jamás hubiera pensado que era la puta de mi hermana» manifestó la mujer y hermana de los afectados, informando además que no era tóxico y que solo tenía como efectos secundarios «el divorcio».
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