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Íñigo Errejón sigue dando que hablar a sus detractores. La última ocasión ha sido esta mañana, cuando sin rubor ha sacado su fidget spinner, artefacto de moda entre los niños de España, y ha estado mostrando sus habilidades con él durante un buen rato en el Congreso de los Diputados.
Los congresistas del PP se han apresurado en criticar esta demostración del político de Podemos. Soraya Sáez ha reprochado a Íñigo que «sigue dando muestras de su inmadurez personal y política. Intenta conseguir captar a los jóvenes, pero realmente hace el ridículo». Albert Rivera también se ha pronunciado al respecto. «Al Congreso se viene a trabajar, a buscar soluciones, a mejorar la vida de los españoles, no a jugar con el cacharrito ese. Mi hija tiene uno, pero al colegio no se lo lleva, porque no es serio».
Íñigo Errejón se ha defendido diciendo que «si el pueblo juega al fidget spinner, yo juego al fidget spinner, porque Podemos está con el pueblo».
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