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Dicen que por amor estaríamos dispuestos a casi todo y hay personas que lo cumplen a raja tabla. Inés, salmantina de 39 años, ha fingido durante dos semanas estar contagiada de Coronavirus para atraer a un rastreador que le gustaba, algo que por supuesto provocó la indignación de sus familiares y amigos: “No nos lo podemos creer. Con Paquito el del sexto, si es un pajero”, afirmó su madre.
El chico en cuestión, un vecino suyo del mismo portal que le gustaba desde que era pequeña, se ofreció voluntario para ejercer como rastreador para el ayuntamiento y le cogieron, sin darse cuenta de que él se había convertido en la propia presa: “Estuve un tiempo sin salir de casa porque pensé que me seguían. Me dejaban pistas en el portal de clinex con mocos que me llevaban hasta su piso”, aseguró.
La policía ha abierto una investigación para esclarecer los hechos y valorar la posibilidad de poner una sanción disciplinaria a la acusada, por injurias, acoso, daños y prepucios.
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