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José Ramírez se hará famoso por haber creado jurisprudencia en un caso jurídico insólito nunca visto. El año pasado no acudió al trabajo a desempeñar su tarea habitual de administrativo, y cuando fue requerido por el departamento de recursos humanos alegó que se había ausentado de su trabajo porque era su cumpleaños y era un día muy especial para él.
José fue despedido inmediatamente, y seguro de haber sido víctima de una injusticia, puso una denuncia la empresa por despido improcedente. El juicio se ha celebrado esta semana en Cádiz y sorprendentemente le da la razón al trabajador que tendrá que ser reincorporado en los próximos días, además de recibir una indemnización por los días no trabajados y los daños morales.
La sentencia decía así: «Queda demostrado que José Ramírez Valdés vive su cumpleaños desde que era pequeño de una forma especial, y que de haber acudir al trabajo esto le hubiera causado un daño psicológico grave, por lo que se ordena a la empresa reincorporarle de inmediato y concederle día libre en sucesivos cumpleaños mientras forme parte de la empresa».
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