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En noviembre de 2021 se produjo un hecho sin precedentes en el baloncesto español. Un campeón de la NBA, Marc Gasol, regresó para jugar en nuestras canchas. Es cierto que su hermano Pau, que cuenta con dos anillos, también volvió el año pasado a la Liga ACB. Pero en el caso de Marc, el regreso fue aún más sorprendente, porque ha puesto su talento y experiencia a disposición de un club de la segunda categoría de nuestro básket, la LEB Oro. Las casas de apuestas online se frotan las manos ante la revalorización de la competición, que añade así un foco de interés: ¿logrará Marc Gasol devolver a la máxima categoría al Básquet Girona?
La presencia en las canchas del menor de los hermanos es todo un acontecimiento. Atrae miradas e interés, porque no todos los días se puede ver en la pista al campeón de la NBA (Toronto Raptors, 2019), doble campeón del Mundo (Japón 2006 y China 2019), campeón europeo (2009 y 2011) y subcampeón olímpico (Pekín 2008 y Londres 2012).
Marc Gasol ha sido Allstar (disputando aquel histórico salto inicial con su hermano Pau) en la mejor liga del mundo, que ha disputado durante trece años en tres equipos: Memphis Grizzlies (2008-2019), Toronto Raptors (2019-2020) y Los Angeles Lakers (2020-2021). Pero su llegada a la LEB Oro no ha tenido nada que ver con la de otras estrellas a las que se presume en su ocaso. Promedia 13,9 puntos y 8,5 rebotes por partido, con una media de casi 25 minutos de juego. Datos que evidencian que ha regresado muy en serio para ayudar al Básquet Girona a volver a la ACB, la máxima categoría de nuestro baloncesto.
La pregunta es obvia: ¿qué le ha llevado a disputar sus últimas temporadas como profesional para un club de la segunda división del básquet?
Todo se explica porque Marc Gasol no es solo jugador, sino también fundador y presidente del Básquet Girona, el equipo de la ciudad en la que terminó por explotar como jugador antes de su salto a la NBA. El Akasvayu Girona (luego CB Sant Josep) desapareció en 2013 acosado por las deudas y arrastrado por los efectos de la burbuja inmobiliaria. Marc Gasol sufrió aquello, pero un año después fundó el nuevo club de la ciudad. Ahora ha regresado para presidirlo y ayudar desde la cancha a materializar el anhelo de regresar a la máxima categoría.
Actualmente el club disputa su segunda temporada en la LEB Oro. Evidentemente, la presencia de Gasol permite avanzar más rápido en los objetivos deportivos. Actualmente el equipo marcha quinto, pero Gasol ya ha avisado: “No vamos a correr para llegar a la ACB”.
Su apuesta va más allá del rápido ascenso de categoría, y tiene un proyecto más ambicioso: se trata de ampliar la base social, directiva y económica. Garantizar la sostenibilidad económica y profesionalizar el club para crecer de forma ordenada. La entidad gerundense cuenta actualmente con unos 2.000 abonados, y una cantera de 250 menores repartida en 21 equipos.
Gasol aspira a volver a la élite del baloncesto español, pero también algo todavía más relevante: asentar un equipo de baloncesto en la ciudad que una vez lo perdió.
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