This post has already been read 8304 times!
Un español que estaba realizando una expedición por el África profunda fue sorprendido por una serpiente que desgraciadamente mordió al explorador en sus órganos genitales. Rápidamente fue socorrido por sus compañeros de expedición, que lo trasladaron al centro médico más cercano.
Sin embargo, ninguno de ellos fue capaz de realizar la maniobra de extracción recomendada para estos casos, consistente en morder la zona infectada y succionar el veneno para escupirlo, por lo que al llegar al campamento médico se encontraba grave ya que se había extendido por la sangre de todo el cuerpo.
Los acompañantes del accidentado se excusaron en que no conocían dicho sistema y por ello no lo habían aplicado, aunque extraoficialmente corre el rumor de que en realidad no lo hicieron porque les daba mucho asco morder la zona afectada, extremo que siguen negando tajantemente ante los medios.
This website uses cookies.