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El pasado lunes, una de las mejores playas de toda Andalucía, la playa de Bolonia, en Cadiz, era el escenario de un curioso incidente ocurrido cuando un bañista tenía la genial idea de pescar un pulpo y esconderlo en su propio bañador.
El Servicio de Urgencias de la localidad atendía poco después de las 13:00 horas a un joven que se aquejaba de fuerte dolor en su zona genital, presentándose con la ropa de baño todavía húmeda, «no se ría doctor que no estoy para bromas, estaba buceando en superficie, he visto un pedazo de pulpo y lo he cogido para regalarlo a mi madre, cuando salía loco de contento un amigo me ha dicho que hacer eso tiene denuncia de 300 euros así que lo he metio en la red de los huevos del bañador, el hijoputa se ha enroscao como una culebra y lo he tenio que sacar corriendo que me destrozaba».
Sin poder evitar la risa y tras haber explorado la dolorida zona, el médico lo remitió al Hospital aconsejándole no mezclar los huevos con el pulpo, mejor con patatas y en un bar.
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