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Cándido L., vecino de la provincia de Lleida de 82 y años de edad, tuvo que ser ingresado ayer de urgencias en el Hospital Universitari de dicha localidad al confundir una botella de Jägermaister con la de enjuague bucal.
Todo sucedió al ir a acostarse. Cándido ya se había quitado las gafas que necesita para poder ver bien de cerca y se disponía a ir a la cama, cuando recordó que no se había lavado los dientes. Fue entonces cuando cometió el terrible error, y cogió una botella del afamado licor de hierbas y procedió al enjuague de su boca. Ello le provocó graves quemaduras en la boca, y tuvo que ser llevado de urgencias al hospital.
«Lo tuve que hacer todo a tientas y me equivoqué. Cuando me dí cuenta del error ya tenía la boca llena y había hecho alguna gárgara», comenta el anciano. «El paciente ingresó con quemaduras graves en encías y velo del paladar. Eso sí, no paraba de reír y de pedir unas almendritas para acompañar. Decía cosas incoherentes, suponemos que por el dolor», nos narran desde el servicio médico.
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