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Un joven de Castellón ingresó en la unidad de urgencias de un hospital la pasada madrugada con algunas lesiones en el ano. El chico, de 26 años de edad, acudió en compañía de su padre y por su propio pie al centro hospitalario, alrededor de las once de la noche, incapaz de detener la hemorragia y visiblemente asustado. El sangrado hizo temer unas lesiones graves que afortunadamente no se produjeron.
Cerca de las siete de la mañana y tras permanecer toda la noche en observación, fue dado de alta. Según le explicó a los médicos que lo atendieron, las lesiones se las produjo él mismo de forma accidental cuando trató de limpiarse el ano con un aspirador. Al parecer, el joven había utilizado el aparato de limpieza para tal menester en otras ocasiones, pero esta vez colocó la potencia al máximo y el resultado no fue el esperado.
Desde el hospital desaconsejaron el uso de un aspirador para eliminar los restos fecales. Expusieron que puede tratarse de un método efectivo, incluso placentero, pero muy peligroso para la integridad física de las personas.
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