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Un vecino de Talavera de la Reina tuvo que ser ingresado el día de su boda, debido a una reacción alérgica al glúten que contenía el arroz que le lanzaron sus familiares y amigos al salir de la iglesia.
Al parecer, unos amigos se pasaron de efusividad y lanzaron más arroz del que normalmente requiere la tradición, y debido a ello el recién casado tragó una pequeña cantidad de dicho cereal. Ya luego, durante la sesión fotográfica en un parque de la localidad toledana, empezó a sentirse indispuesto, teniendo que ingresar en el hospital más cercano.
«Ya le dije a Antonio que controlara a sus amigos, que sabía yo que alguna burrada iban a hacer», se lamentaba luego la novia. «El día de la despedida de soltero ya tuve que ir con mi hermano a recogerlo a Ibiza, que lo habían dejado allí tirado con lo puesto», añadió.
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