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Un granadino de 20 años ha sido hospitalizado tras destrozarse los colmillos intentando lijarlos en casa para su disfraz de Halloween.
Al parecer el joven había hecho todo su disfraz de vampiro para la noche de Halloween «había un fiestón y quería petarlo, así que llevo semanas currándome el disfraz a mano, me he dejado el pelo largo para engominarlo, me he ido sacando sangre para luego maquillarme con ella y me faltaba el último detalle nada más». Ese último detalle al que se refiere es a los colmillos, para aportar otro granito más de realismo a su obra de arte quiso ir un paso más allá y usar sus propios dientes.
Para lograrlo decidió lijarse los colmillos hasta darles la forma puntiaguda deseada «me pareció lo más sensato, además me imagine como lo petaría con las chicas en la fiesta enseñando mis dientes, así que me puse manos a la obra y cogí un par de lijas de mi padre para llevar a cabo mi plan». En su afán por ser lo más realista posible se excedió con el lijado y, además de realizarse diversos cortes en las encías, llegó a dañar seriamente el nervio causándose horribles dolores.
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