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La famosa red social ha reconocido un error en su filtro de censura e indemnizará a un usuario tras llevar meses censurando sus fotos porque el algoritmo lo confunde con un pene.
Al parecer el usuario en cuestión lleva años usando la aplicación y subiendo contenido a menudo «me encanta la fotografía y me paso el día subiendo fotos, y ya desde que sacaron los stories ni te cuento, pero desde hace meses estoy teniendo problemas con la censura». Dicho usuario es calvo desde hace años, pero hasta hace poco nunca se había rapado el pelo al cero «llevaba años combatiendo la calvicie pero finalmente me rendí y me rapé por completo, fue entonces cuando comenzaron mis problemas en Instagram».
Tras reportar el problema descubrieron que el algoritmo de censura sexual que aplica Instagram estaba confundiendo su cara con un glande y por eso le censuraban todas las nuevas fotos «me parece denigrante, es cierto en que en el instituto ya me llamaban carapolla, pero de ahí a que un algoritmo confunda mi cabeza con un pene hay un mundo». De momento la red social sigue trabajando para optimizar su algoritmo y mientras tanto han decidido indemnizar cuantiosamente al usuario.
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