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Normalmente, cuando una pareja de novios decide contraer matrimonio, lo primero que piensa es en la cuantia económica que el acto en sí les supondrá si deciden celebrar un convite.
217 «invitados» fueron los asistentes el pasado sábado en un Salón de Celebraciones de la capital española, todo iba perfecto en el banquete hasta que a la hora del postre y por arte de magia, los recién casados desaparecieron sin despedirse ni de los invitados ni del dueño del Salón, hicieron un «sinpa» en toda regla. Tras percatarse de dicha fuga el responsable, llamó de inmediato a Policía los que una vez personados informaron a los asistentes que los novios solo habían pagado la mitad del banquete y el resto les correspondía a ellos. Tras llegar a un acuerdo, los comensales, ataviados con corbata y pamelas se pusieron manos a la obra fregando platos, vasos, cubiertos y barriendo el Salón en compensación con lo adeudado.
Los familiares de los novios han recibido una postal desde Cancún pidiendo disculpas y diciendo que pagando el banquete no podrían haber hecho la luna de miel.
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