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Sucedía en la tarde de ayer en el municipio alicantino de Novelda, una vecina llamaba al 112 solicitando presencia de Policía en su propio domicilio por una discusión con su marido.
Personada una patrulla, la requirente informó a los agentes del problema que tenía «mi marido el gandul, que está tres meses con los huevos esclafados en el sofá, no sale ni a por el pan, ni mucho menos a buscar trabajo, quiero que lo obligueis a salir» manifestaba la enojada señora a los atónitos agentes». Parece ser que tras entrevistarse con el susodicho, además de alegar que todavía estaba el virus, justificaba que su confinamiento se debía al engaño que estaba padeciendo a diario por parte de su señora».
«Les voy a contar la verdad, dice mi mujer que hasta la fase 16 no se puede tener sexo, pues… Ni buscar trabajo tampoco, ya se pueden ir que no voy a salir de mi casa,.
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