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Una vallisoletana de 33 años se ha convertido en viral en su pueblo natal tras conocerse que lleva casi 2 años ingeriendo varias veces al día el semen de su marido para intentar quedarse embarazada.
Al parecer, y según cuenta la propia protagonista una vez el caso saltó a los medios, la pareja lleva muchos años intentando tener un hijo pero no lo han logrado y por lo tanto decidieron probar con sus propios métodos caseros «estaba claro que entrando el semen por abajo no era capaz de llegar a donde tiene que llegar, así que decidimos probar al revés». Según confiesa, al principio le daba un poco de asco, pero finalmente le ha pillado el gusto y se ha convertido casi en una adicción.
El marido ha informado que «al principio me la chupaba, se lo tragaba y listo, pero poco a poco, y al ver que no funcionaba, empezó a pedirme que me ordeñase a diario para tener semen para beber durante todo el día, ahora mismo incluso lo usa para alguna receta, eso si, solo para comer ella, yo paso». Tras beber 2 copas de más y contar esta comprometida práctica a una amiga, se hizo viral la noticia en su pueblo.
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