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No pasa un solo día sin que la Guardia Civil se sorprenda con algún conductor, la última imprudencia que han tenido que presenciar es un conductor conduciendo con su pene para impresionar a su reciente ligue.
El suceso tuvo lugar la pasada madrugada, durante un control rutinario una pareja de agentes dio el alto a un vehículo sin esperarse para nada lo que iban a encontrarse. El conductor iba en un Mercedes descapotable, lo acompañaba una mujer, espectacular según comentaron los agentes más adelante, y lo curioso de todo era que llevaba las manos en los bolsillos y manejaba el volante con… su pene.
Uno de los agentes cuenta como «nos quedamos sorprendidos, jamás habíamos visto algo así, y no hablo solo de las dimensiones descomunales del miembro, si no de su habilidad para el manejo del volante, hasta que no se paró justo a nuestro lado no nos dimos cuenta de nada». Obviamente la admiración inicial de los agentes no le libró al conductor de su correspondiente multa por conducción temeraria.
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