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La curiosa «pillada» ha tenido lugar en Valladolid, un sacerdote fue visto en un supermercado comprando varios paquetes de preservativos y cuando fue reconocido y le preguntaron al respecto alegó que iban a ser usados como globos de agua en una celebración eclesiástica.
Al parecer el párroco acudió a un supermercado cercano a la Iglesia que regenta desde hace ya más de 20 años y compró varias cosas, incluidos 6 paquetes de condones «de primeras no lo reconocí ya que iba de paisano, imagino que para evitar sospechas, pero cuando vi los 6 paquetes me extrañó, nadie suele comprar tantos, así que miré directamente al cliente y me di cuenta de quien era».
El cajero saludó al cura y le preguntó con sonrisa cómplice para que querían tantos preservativos, a lo que el cura sonrojado contestó «no pienses mal hijo, celebramos una fiesta para recaudar dinero para los inmigrantes y el chino de la esquina está cerrado, así que no he podido comprar los globos de agua y se me ha ocurrido improvisar, ¿para qué otra cosa podría quererlos por Dios?». El cajero prefirió no hacer más preguntas pero compartió el suceso en Twitter y ya se ha hecho viral.
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