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El pasado viernes sobre las 13:00 horas, desde el Centro de Salud de un municipio alicantino se requería con urgencia por medio del 112 la presencia de Policía en dichas instalaciones al haber un hombre muy alterado queriendo agredir a un médico de cabecera.
Tras la personación de una patrulla de Policía Local en dicho Centro y una vez localizado el presunto amenazante, consiguieron calmarlo siendo invitado a abandonar el Centro de Salud. Una vez en la puerta y tras ser preguntado por los motivos de tal alteración, respondió según un testigo presencial… «Lo siento, me he puesto muy nervioso, es verdad, pero al puto médico ese lo caliento yo cuando salga, le hizo a mi mujer las pruebas de la alergia y le dijo que entre otras cosas era alérgica al polvo, desde entonces no quiere follete ningún día, dice que de polvo nada que lo primero es su salud».
Los agentes se miraron conteniendo las risa explicándole que estaban confundidos, que con el polvo se refería a los ácaros que resultan de la limpieza… pero no del sable, de casa.
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