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Un joven asturiano ha sido noticia tras aprobar el examen práctico de conducir totalmente borracho, a las horas de la consecución del carnet y tras sospechas de su examinador le fue retirado el carnet.
El joven de 19 años de edad había aprobado a la primera y sin fallos el examen teórico, pero el práctico, aunque lo llevaba perfectamente preparado, le daba más respeto. Su padre le aconsejo tomarse un buen lingotazo para quitar los nervios y decidió hacerle caso «no sabía muy bien a que se refería mi padre con eso de un lingotazo, así que me tomé un ron, no notaba mucho relajación y se me fue de las manos».
Según parece se presentó al examen puntual pero con 6 «rones» entre pecho y espalda, sorprendentemente esa desinhibición le vino bien y aprobo el examen sin una sola falta, el problema llegó cuando le comunicaron que había aprobado y le dio un abrazo y un beso al examinador «me vine arriba, la ilusión me pudo y me pillaron, me merezco la retirada del carnet».
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