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De vez en cuando algún vasco hace honor a su fama y salta a las noticias por hacer gala de su carácter más bruto, este es el caso de nuestro protagonista, un joven bilbaíno que precisó de la ayuda del servicio de emergencias tras desmayarse por intentar inflar una rueda de su coche a soplidos.
Lo que parece un mal chiste ha sucedido este pasado fin de semana en la comarcal hacia Getxo, un joven de 26 años sufrió un pinchazo en una de sus ruedas «sentí el reventón y paré inmediatamente, la verdad que iba con prisa y no me podía parar a cambiar la rueda, así que decidí solucionarlo por mi cuenta».
Su extraña ocurrencia fue meter una piedra para taponar el pinchazo e intentar inflar la rueda de nuevo soplando a pleno pulmón «no pensé mucho la verdad, hice lo primero que se me ocurrió, pero claro, una rueda de 17 pulgadas no es un globo de cumpleaños, así que al rato soplando perdí el conocimiento y tuvieron que venir a rescatarme gracias a la llamada de una conductora que me vio tumbado en el asfalto».
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