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Un vuelo operado por la compañía de bajo coste Ryanair y que tenía que haber salido ayer a las 15:00 horas de la tarde del Aeropuerto Seve Ballesteros de la ciudad de Santander con destino a Milán (Italia) sufrió un retraso de 5 horas porque una vaca de considerables dimensiones ocupó la pista de despegue impidiendo a la aeronave maniobrar por motivos de seguridad.
Nadie sabe por dónde apareció la vaca pero minutos antes del despegue se colocó justo en la pista donde el avión debía despegar y se quedó totalmente quieta. Fue el propio piloto quien avisó a la torre de control de lo sucedido que de inmediato activaron el protocolo de seguridad. Los operarios del propio aeropuerto intentaron en vano apartar la vaca de la zona de despegue, incluso la unidad de bomberos la roció con agua en un intento desesperado por desbloquear la situación pero no tuvieron éxito.
Dos vuelos más que tenían que haber aterrizado en el Aeropuerto Seve Ballesteros de Santander tuvieron que ser desviados al vecino Aeropuerto de Bilbao por motivos de seguridad. Finalmente tuvieron que buscar a un grupo de vacas y con su ayuda consiguieron dejar la pista libre. Por fin el aeropuerto volvió a la normalidad y el vuelo con destino a Milán pudo despegar a las 20:22 horas, con algo más de 5 horas de retraso.
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