Lleva 24 años haciéndose pasar por gitano para triunfar en el flamenco

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Germán Reber Sanz era un cantante hijo de un alemán y una española, nacido en Burgos. Su sueño desde pequeñito fue triunfar en el mundo de la canción incluso llegó a grabar un disco con su grupo “Los camicazes” pero que no tuvo la repercusión mediática que esperaban.

Germán descubrió el mundo del flamenco cuando en 1992 visitó la Exposición Universal celebrada en Sevilla. Fue entonces cuando se enamoró de esta maravillosa música y decidió que su objetivo en la vida era cantar flamenco. Para ello el burgalés decidió dar un giro a su vida completamente por que Germán cambió sus costumbres e incluso su identidad, pasó a llamarse Domingo Heredia. “Creí que siendo gitano tendría más opciones de poder triunfar en el flamenco, no me lo pensé dos veces y aquí estoy” nos comenta Domingo.

Hoy es conocido como “El Fulanito de Jerez” y es un reconocido cantaor flamenco. “No me arrepiento de nada, siendo gitano me he encontrado a mí mismo”.  Germán ha querido destapar su verdadera identidad después de 24 años de carrera y habiendo sido galardonado éste mismo año en el Festival Internacional del Cante de las Minas con el premio honorífico por su trayectoria en el flamenco. “Espero que ahora que saben que no soy gitano mi público no me dé la espalda”.