Lleva el ataúd de su suegra en su furgoneta porque no quería pagar un coche fúnebre

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La Guardia Civil denunció el pasado martes a un conductor madrileño que transportaba en su furgoneta un ataúd con un cadáver en su interior. El féretro pertenecía a su propia suegra, a la cual, según explicó, se disponía a llevar al cementerio de La Almudena a fin de que fuera inhumada.

La pareja de agentes de la Benemérita hicieron las averiguaciones pertinentes que le permitieron comprobar que el cuerpo pertenecía a la mujer y que ésta constaba como fallecida hacía un día. Lo sorprendente vino cuándo los agentes le preguntaron por el motivo de tan inusual traslado, a lo que el hombre respondió que no quería asumir los costes de un coche fúnebre. Los guardias solicitaron la presencia de la empresa funeraria que había tramitado los permisos para el enterramiento. El responsable de la misma corroboró el testimonio del conductor. Los agentes, sin embargo, denunciaron al yerno de la fallecida por transportar sin permiso y en un vehículo no apto un cadáver e instaron a la funeraria a que fueran sus operarios quienes finalizaran el trayecto.

El hombre alegó que su suegra no se merecía «que nos gastásemos un duro en ella. Si por mí hubiese sido, la hubiera enterrado enrollada en una alfombra en el jardín, pero mi mujer que es una buenaza ha optado por hacerlo como los ricos».