Un policía pide que le cambien de compañero porque se tiraba pedos en el coche patrulla

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Un Policía Nacional de Gijon, en Asturias, ha sido noticia la tarde de ayer tras declarar en contra de uno de sus compañeros al que acusa de tirarse flatulencias dentro del coche patrulla constantemente: “Me pasó el día abriendo la ventanilla para poder respirar y al final me congelo de frío. Es insoportable. Lo siento en el alma pero no puedo seguir con él”.

Aunque parezca surrealista no es la primera vez que se escucha una denuncia de este tipo en España. Son muchas las horas que los agentes de la ley pasan juntos patrullando las calles, a veces más que en sus propias casas, y sobre todo en un espacio tan pequeño como es un coche, por lo que cuidar la higiene se convierte en algo fundamental para el bienestar de ambos.

El hombre acusado, un agente que lleva toda la vida en el cuerpo y está a punto de jubilarse, ha reconocido sus problemas estomacales, siendo apartado del resto de compañeros y concediéndole un vehículo propio para evitar que se vuelva a producir este tipo de malentendidos.